Nictálope

Cuando escribo a solas y sin tu luz
me vuelvo nictálope,
el verano se duerme y la nevisca cubre la brevedad
de este instante y esta calle sin sueño.
El obituario de días que no vinieron
O el cementerio de impulsos,
o quizás la rebelión de los cuerpos
Ocupan las primeras planas de periódicos novelescos.
Es solo el umbral de nueve líneas combinadas
Entre fantasías y labios frescos.
Es la policromía de letras y mensajes absurdos o más bien,
La sátira del sabio y el prefacio de la firma y fecha
de una confesión silenciosa entre líneas y letras.
Es vulgarmente la maña de pensarte y escribir
De lo bueno, lo malo y absurdo que es estar contigo
Y sin ti.