jueves, 11 de diciembre de 2008


Y en medio de las medias tintas  salta este interrogante con nombre y rostro desconocido.
El representante abanderado del triunfo del valor sobre el miedo
el alma joven y libre sin pasado y sin fantasmas.
El desconocido que me incita a una aventura sin moldes y sin pretextos.

Y en medio de la caricia vino tinto y la piel salta el intangible,
 el imaginario del paralelo de mi mente
la materialización del berrinche de no conformarme con menos.


2 comentarios:

Unknown dijo...

Ojala el valor siempre triunfara y venciera al miedo, y que el hecho de no conformarnos con menos no fuera solo un berrinche. Porque en mi caso, el miedo suele hacerle trampa al valor.
Gracias por lo que escribes.

Kestler dijo...

... Las trampas las hay por doquier... unas veces caemos pero es obligación superarlas... sin embargo la idea s jugarle la vuelta al destino o la casualidad... a nosotros mismos! a nuestros miedos y fantasmas e intentar escribir una página diferente...
Gracias a ti por leerme.